Macson, la firma de moda masculina, abrió ayer su flagship en el número 110 del Paseo de Gracia, en la esquina de la Av. Diagonal. La tienda cuenta con 320 m2 cuadrados divididos en 2 pisos: 200 en la planta de acceso y 120 en la superior.
Macson es una empresa nacida en Barcelona durante el año 1942 como firma de camisería masculina. Durante estos 72 años de historia, varias generaciones de la familia Obradors han estado al cargo de la misma. Esta compañía de capital 100% privado dispone en la actualidad de 58 tiendas propias: 47 propias y 11 franquicias. Durante el año 2015 tienen previsto abrir 12 tiendas más.
Como hemos resaltado en varias ocasiones, la tendencia de la moda masculina está en alza, y la boutique de Paseo de Gracia permite a Macson estar en un enclave con una proyección internacional única como representa el Paseo de Gracia. En palabras de Domingo Obradors, director comercial de la firma:
Para una empresa familiar catalana como Macson, es un orgullo entrar en el Paseo de Gracia y más en un momento como el actual, en el que nos encontramos en plena expansión internacional.
A esta nueva apertura, se suman muchas otras de reciente actualidad, como Versace, Mango Man, la lencería de lujo Wolford, la joyería originaria de Viena Frey Wille, entre otras.
El interiorismo del local ha sido diseñado por la decoradora Sara Folch, que en sus propias palabras:
La nueva tienda Macson es luminosa, actual y cálida, ya que cuida todo tipo de detalles, para que el cliente se sienta confortable
Folch ha creado un interior donde predominan los materiales como el mármol y la madera y los colores gris, blanco y negro en sintonía con la imagen de la firma. El mármol está presente en el suelo de damero y en las distintas mesas mostrador y de apoyo cromado en negro, creado en exclusiva para Macson por Sara Folch. La ropa se distribuye en distintos muebles lacados en gris y tapizados con tela tornasolada en gris ardesia. Un detalle a destacar es que dos vitrinas antiguas que pertenecían al diario La Vanguardia han sido restauradas y ahora albergan los complementos de la firma. Los probadores disponen de pequeñas salas de estar donde los acompañantes pueden esperar sentados mientras los clientes se prueban la ropa, ambos tapizados en terciopelo gris ardesia.El techo del local, una bóveda de volta catalana, también está pintada en gris.
Todo ello, confiere a la nueva flagship una imagen elegante, con un toque clásico e indudablemente masculino. La tienda ofrece ropa y complementos para un hombre urbano mayor de 25 años que busca funcionalidad, personalidad y un estilo propio y llevable, con preferencia por la calidad de sus tejidos naturales y el detalle de los complementos.