miércoles, noviembre 27, 2024
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    Qu’est-ce que la haute couture: ¿Son Instagram, los elevados precios y la desaparición de los oficios artesanales el peligro de la Alta Costura?

    La cartelera de la última edición de Moritz Feed Dog nos está dejando auténticas joyas cinematográficas en lo que al mundo de la moda respecta, poniendo sobre la mesa temas de capital importancia en un sector que ha tenido que reinventarse a lo largo de los siglos y que con la era de las redes sociales ha sufrido, y sufrirá, importantes cambios.

    Uno de los fashion films más destacados de la cita de este año ha sido Qu’est-ce que la haute couture? (¿Qué es la Alta Costura?), un film que se adentra en los talleres de las casas más importantes de alta costura para entrevistar a diseñadores y trabajadores de este sector y descubrir los entresijos de un concepto del que todos hemos oído  hablar, que genera millones en puestos de trabajo e ingresos, y que puede desaparecer.

    La Alta Costura es el nicho de la moda en donde la creatividad no tiene límites y donde la pasión es la única directriz.

    Lo obra cinematográfica en la que el prestigioso periodista Loïc Prigent se adentra en este mundo deja patente una cosa: que la Alta Costura es algo sublime, algo especial y extraordinario, no solo por su precio sino porque en su concepción no hay reglas, todo es posible. Se trata del nicho de la moda en el que no se tienen en cuenta las tendencias ni las demás reglas que hacen comerciales y asequibles, por ejemplo, al Prêt-à-porter.

    En esta idea convergen tanto Donatella Versace, Karl Lagerfeld, Elie Saab, Jean paul Gaultier o Armani, la alta costura no es solo el precio, o el hecho a medida, es la creación de moda en mayúsculas a partir de técnicas artesanales.

    El significado de la Alta Costura.

    Qu’est-ce que la haute couture? Pone de manifiesto que la genuina cuna de este fenómeno es París y que quienes hoy quieren permanecer en ella deben pasar sí o sí por la capital gala. Este es el único enclave en el mundo en el que se exhibe la genuina Haute Couture, término protegido por la ley  y de uso exclusivo, y excluyente de quienes fabrican en París. En sentido estricto, desde el S. XIX, Alta Costura es un término que sólo pueden utilizar las firmas que cumplan con los estándares definidos por la Chambre Syndicale de la Haute Couture.

    © Elie Saab.

    Cada año, se celebra en París, la semana dedicada a esta industria. A ella solo pueden acceder las firmas y casas que la Chambre Syndicale de la Haute Couture elige cada año a partir de una comisión liderada por el Ministerio de Industria francés y que tienen derecho a emplear la designación Haute Couture. Son miembros permanentes de este listado Chanel, Valentino, Dior, Giorgio Armani, Jean Paul Gaultier (quien ha dejado esta disciplina por sus elevados costes), Stéphane Rolland y Giambattista Valli. Cabe precisar que para convertirse en un miembro permanente, la casa de moda debe haber sido un «miembro invitado» durante al menos cuatro años y estar patrocinado por una casa de moda como ocurre con Elie Saab o Versace, entre otras. Todas, tanto las firmas invitadas como las permanentes deben tener atelier en París con al menos 20 trabajadores especialistas en técnicas artesanales y presentar dos veces al año un número determinado de looks.

    En sentido estricto este es el verdadero significado de la Alta Costura que se ha desdibujado con la aparición del prêt-à-porter femenino, y que ha hecho que el término se emplee para denominar a aquellas firmas o diseñadores que crean moda a medida para diferenciarse de aquél.  

    La edad de oro de la Alta Costura en Barcelona

    Para incidir en estos aspectos la organización de Moritz Feed Dog llevó a cabo un coloquio en el que Josep Casamartina, director de la colección Antoni de Montpalau (la mayor colección privada de trajes de Alta Costura en España); Luis Sans, Director de Santa Eulalia y Elisa Lacambra, diseñadora y equipo creativo en Carmen Mir,  debatieron acerca de la edad de oro de la Alta Costura en Barcelona que importó desde París hasta nuestra ciudad la forma de hacer moda siguiendo las notas de diseño a partir de una fabricación artesanal y hecha 100% a medida.

    En el debate los ponentes resaltaron la tradición textil de Barcelona que en su época dorada fue el germen de la moda en España e impulsó la creación de moda hecha a medida como en los mejores talleres de París, muchos de los cuales se proveían en nuestra ciudad de mano de obra artesana.

    Todo es más difícil desde que existe internet. Vas a una fiesta con un vestido y ya lo ha visto todo el mundo.

    El ascenso de la moda hecha a medida, en Barcelona, pasaba por la clásica burguesía catalana protagonista de la vida política, económica y social que se desarrolla en el Liceu. Luis Sans, Director de Santa Eulalia asevera que el estreno de temporada del Liceu era un acontecimiento en el que se implican todas las casas de moda de Barcelona. Hasta nuestra ciudad llegaban modistas de toda España para ver los modelos que se exhibían a la entrada del teatro y proveerse en Santa Eulalia de los tejidos que después circulaban por toda España.

    Los tres invitados al debate han coincidido en que el verdadero sentido de esta industria,  lo compone el uso de técnicas nacidas en tiempos pretéritos que ahora se encuentran en vías de extinción por la falta de viabilidad económica; la falta de interés de las nuevas generaciones en aprender estos oficios y  la pérdida del concepto de exclusividad. El uso de las redes sociales e Instagram ha revolucionado a la moda y el uso ellas en términos publicitarios y de ventas también influye: el prêt-à-porter se vuelve más veloz e instagramizable pero  perjudica a la creación y al diseño de prendas hechas a medida.

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