Las restricciones de la pandemia no detienen el glamour y la exclusividad que irradia la semana de la alta costura.
Hasta el 27 enero París vuelve a ser el centro de la alta moda con firmas de primer nivel como Schiaparelli, Christian Dior, Azzaro Couture, Chanel, Valentino, Elie Saab o Fendi Couture.
De esta forma las firmas más importantes optan por desfiles presenciales como forma de dinamizar el sector. Entre las grandes ausencias están Armani Privé, Balenciaga o Maison Margiela.