La moda igual que la sociedad va cambiando constantemente y las nuevas generaciones, en especial la Generación Z, apuestan por el fin de la normatividad y de la ropa con género, así se aprecia en las últimas temporadas. Se trata de una tendencia que ha venido para quedarse.
La normatividad hace referencia a todo aquello aplicado a una norma, en el ámbito de la moda hace referencia a no salirse del guión y la imagen común entre la población. La ropa sin género, por su parte, también se ha posicionado como una opción mucho más habitual gracias a los diseños genderless.
Estel Vilaseca, profesional del área de diseño de moda en la escuela LCI Barcelona, explica que la Generación Z está rompiendo con los estereotipos y lo preestablecido, vistiéndose con mucha libertad. Por esta razón, las marcas y las pasarelas se unen y reflejan esta diversidad en sus colecciones.
Estas tendencias también se han visto apoyadas por grandes rostros del mundo de la música o el cine. Un ejemplo es Bad Bunny, uno de los cantantes de moda del momento: posó con vestido, tacones y maquillaje para Harper’s Bazaar USA. El actor Alejandro Speitzer compartió en sus redes una imagen con un top habitualmente femenino. Y el cantante Harry Styles ha apostado por las transparencias en más de una ocasión.
Los cánones de belleza habituales también se están diversificando y han cogido relevancia modelos curvy en vez de los cuerpos delgados.
La ropa genderless y el respeto por la diferencia de cuerpos se ha asentado entre la masa social y con el apoyo de sus principales representantes en el mundo del arte como puede ser la música o el cine.