La moda se nutre del talento y del poder innovador de las nuevas promesas del diseño. Hace unas semanas conocíamos la noticia de que Dr. Martens se aliaba con los estudiantes de moda de Central Saint Martins para reinventar la icónica bota 1460.
Entre lista, que contaba con 9 new talents, estaba el nombre de Alvarado Mars. Un joven español quien antes de estudiar en CSM, trabajó como ayudante de estilista para Givenchy en París y en el estudio de mítica Vivienne Westwood.
Aprovechamos el tirón mediático de esta innovadora acción de la marca de calzado, para conocer más a uno de los nombres que seguro nos dará buenas noticias en el efervescente mundo de la moda.
1. ¿Cómo describes tu trayecto en el mundo de la moda hasta ahora?
De momento, lo que llevo recorrido en la industria ha sido muy intenso en muy poco tiempo, como una buena carcajada o un cigarro que no quieres que se acabe. Podría definirse en una lucha constante entre la certeza y la más absoluta incertidumbre. Si echo la vista atrás, puedo ver un crecimiento exponencial en mi carrera; supongo que cada día estoy un paso más cerca del diseñador que quiero ser. A día de hoy, intento analizar y tomar decisiones con más madurez; al fin y al cabo, todo empezó hace cuatro años, cuando yo tenía veinte.
2. Cuéntanos como ha sido el proceso de colaboración con una marca como Dr. Martens.
Hace unos meses, se nos planteó este proyecto en colaboración con Central Saint Martins y Dr. Martens; creo que este tipo de proyectos me ayudan a descubrir otra faceta más de mi universo creativo. Desde la primera reunión que tuvimos nos dieron mucha libertad, tan solo unas pautas muy claras en relación con el espíritu de la marca. Yo tuve claro desde el primer momento de lo que quería hablar; quería hablar de mi experiencia personal con la firma. Mi proyecto es una oda a mi yo adolescente, un adolescente que iba a clases de ballet con las Docs; de ahí que mi propuesta sea literalmente unas botas 1460 en la primera posición. Ha sido todo un reto trabajar con una firma tan icónica que para muchos es un símbolo, creo que la experiencia me ha enriquecido mucho. Nos han dado una plataforma para exponer nuestro trabajo y visión creativa para así poder llegar a un público más amplio. Este tipo de proyectos son muy importantes para los diseñadores emergentes.
3. ¿En tu evolución profesional cuáles han sido, o son tus referentes?
Siempre me ha apasionado la figura del “couturier”, ese diseñador que era de alguna forma artesano y artista, por muy desfasada que parezca la idea. Con el tiempo y la experiencia que llevo, me he planteado cuál es la industria de la que quisiera formar parte; me gustaría formar parte de una industria que no corre tanto, que evita las producciones masivas y que, sobre todo, tenga como pieza angular la artesanía que solía caracterizar esta profesión. Desde pequeño he sido amante de la “haute couture” o “la moda de París” como dice mi abuela, así que los referentes que tengo abanderan esa idea de la moda que te hace soñar. Podría nombrar a diseñadores como Cristóbal Balenciaga, Galliano, Gaultier, Westwood…
4. ¿Cuál es tu visión de futuro sobre la moda española?
El futuro de la moda española tiene de apellido la palabra cambio, un cambio que espero, que venga más pronto que tarde. A pesar de ser un panorama muy rico en lo que se refiere a talento y mano de obra, sigue faltando industria; necesitamos que se inculque más la cultura del emprendimiento, que se ofrezcan más ayudas/medios y que se creen plataformas reales donde se abogue por la comunidad creativa (en todas sus vertientes).
5. ¿Consideras que nuestro país es un buen escenario para el talento emergente?
Hoy en día no lo creo, espero pronto equivocarme. La realidad es que, para creativos en general, es muy difícil encontrar oportunidades en España; de ahí que la gran mayoría tengamos que mudarnos a otro país para perseguir nuestros objetivos.
6. Bajo tu punto de vista, ¿qué avances ha experimentado la industria de la moda?
La industria va cambiando diariamente, y no es que haya una fórmula; se ha convertido en un fenómeno tan global (no lo que se refiere al vestirse, eso ya se lleva haciendo bastante tiempo) que cada vez va más rápido, tan rápido que da hasta vértigo. Los avances van de la mano de los avances tecnológicos y sociales que experimentamos constantemente, si ha eso le sumas toda la cultura “viral”, creas algo parecido a una olla a presión.
7. ¿Qué características debe tener una marca o producto para alcanzar el éxito?
Ojalá que hubiese una fórmula para poder estimar el éxito de algo, si la hay, yo no tengo ni idea. Creo que lo primordial es ofrecer algo único y con sentido; con esto me refiero a tener una propuesta que vaya más allá de lo que puedes colgar en una percha, un ethos de marca coherente, crear un sentimiento de comunidad a través de tu trabajo…
8. ¿Qué es lo que más te enorgullece de tu trabajo hasta ahora, y cuáles son tus planes de futuro?
Me gusta mirar atrás porque veo todo lo que evoluciono y crezco como creativo, probablemente hay cosas que he hecho que hoy en día me horrorizan, pero es cierto que me veo en ellas. Por esa razón, creo que lo que más me enorgullece de mi trabajo es que es totalmente sincero conmigo, y eso es una tarea que no es fácil de conseguir. Espero jugar bien mis cartas y que pronto podáis ver en lo que estoy trabajando, así que estad atentos.
