Milán Fashion Week no puede ser sin Miuccia Prada y Raf Simons. Ambos son un equipo de éxito que tras varias colecciones trabajando juntos, dejan diseños que apuestan por el minimalismo, la elegancia y la sobriedad.
Para la próxima colección de Prada SS24, la firma italiana apuesta por hombreras y transparencias, sedas, satén y colores neutros con diseños que se acentúan con cortes limpios y caídas perfectas.
Estas características son sin duda la gran apuesta de la mujer Prada, que se decanta por diseños arquitectónicos que dan una silueta andrógina pero muy femenina a la vez. Y es que la colección tiene grandes referencias a la sastrería masculina de la casa.
Las siluetas formales, tomadas de la moda masculina, se reinventan con formas arquitectónicas que reconsideran los contornos arquetípicos del rigor formal.
Confeccionados con los materiales icónicos de Prada, los bolsos y zapatos se embellecen con el uso de pieles de alta calidad y tratadas de forma artesanal. A lo largo de estos años el arte sartorial de Prada se ha caracterizado por la perfección en la ejecución y confección de cada diseño, y este arte se está apoderando de las colecciones femeninas.
Asimismo, la colección reproduce y reinterpreta un diseño de bolso ideado originalmente por Mario Prada, abuelo de Miuccia Prada y cofundador de Prada, en 1913. Propuesto originalmente en moaré de seda, el estilo se recrea en piel napa y re-nylon con un cierre tallado a mano que representa una figura mitológica.
Viajero con una profunda curiosidad intelectual e interés por la cultura, Mario Prada viajaba por todo el mundo en busca de objetos preciosos que, a su regreso, ensambla en artículos de lujo únicos.