En un mundo donde las tendencias y las opiniones a menudo eclipsan la autenticidad, Yolanda Pérez nos cuenta una historia de redescubrimiento. La colección Carpe Diem no es sólo una selección de exquisitos diseños, sino un viaje personal y emocional hacia la esencia misma de Yolancris, reafirmando de esta forma el propósito con el que nació la marca.
Carpe Diem es una invitación a abrazar el momento, refleja la decisión de Yolanda de seguir su visión original: desafiar los convencionalismos de la moda nupcial y celebrar la individualidad de cada novia. La colección se convierte así en un diálogo entre diseñadora y novia, donde cada pieza es una expresión de autenticidad y elegancia atemporal.
Sobre la pasarela los diseños deslumbran por sus técnicas y elaboraciones artesanales. Desde el macramé italiano hasta el chantilly francés, cada tejido es cuidadosamente seleccionado para transmitir calidad y distinción. Yolancris se enorgullece de crear no solo vestidos, sino obras de arte que perdurarán en la memoria de las generaciones futuras.
Asimismo, la versatilidad y elegancia son un imperativo. La colección presenta una variedad de siluetas que abrazan el espíritu polifacético de la mujer moderna. Desde vestidos babydoll hasta conjuntos de tres piezas elaborados con detalle, cada diseño captura la esencia de la feminidad contemporánea. La novia Yolancris es audaz, sofisticada y totalmente única.
La selección de joyas de que hemos visto en el desfile son de la firma UNOde 50 y se han caracterizado por su gran tamaño, con detalles de perlas y cristales facetados, que hemos podido comprobar tanto en la selección de colgantes, así como en pendientes y pulseras de la firma de joyería española.