La línea se compone de varias referencias que apuestan por materias primas de gran calidad. Entre las grandes apuestas de la colección destaca Casa Grande, un homenaje a Adele Fendi, quien co-fundó la compañía como una tienda de pieles y artículos de cuero con su esposo, Edoardo, es un aroma a cuero con toques de cereza e incienso.
Mientras tanto, La Baguett se inspira en los hijos gemelos de seis años de la diseñadora de joyas Delettrez Fendi, miembro de la cuarta generación de la dinastía familiar.
Esta fórmula también lleva el nombre del icónico bolso ‘it’ de Fendi, diseñado por Venturini Fendi en 1997. Por su parte, Perché No combina pimienta rosa y sándalo para honrar a I Casali del Pino, el retiro de la familia Fendi desde 2004.
La colección, creada por los perfumistas Anne Flipo, Fanny Bal y Quentin Bisch, está lista para lanzarse en las boutiques de Fendi y en la tienda en línea de la marca el 20 de junio, con un precio de 330€ cada una.
Si bien Fendi ha vendido fragancias, esta es la primera vez que las fragancias de la maison adquieren más protagonismo en la estrategia comercial y de marca de la empresa. La fragancia es una categoría en alza, y la expansión de aromas en clave nicho permite a las marcas premiumizar y diferenciar aún más sus ofertas de las vendidas en el comercio minorista masivo.
Se trata de una actividad en pleno auge entre las firmas de lujo que no han desarrollado al máximo estas líneas. Como dato, en febrero, L’Oréal anunció que lanzaría alta perfumería para Valentino, mientras que Celine lanzó su primera fragancia nueva desde 2022 en abril.