Con motivo del Día de la Madre, Joyería Grau propone un homenaje lleno de sensibilidad y diseño a través de su colección Tubogas. Una línea que resalta la belleza de las conexiones personales con piezas pensadas para compartirse, intercambiarse y atesorarse entre generaciones. Pulseras, collares y anillos elaborados con la técnica del entrelazado de oro que rinde tributo a los vínculos afectivos más auténticos: aquellos que unen a madres e hijas.
La técnica Tubogas, nacida en los años 30 y popularizada por las casas más prestigiosas de la alta joyería, consiste en unir dos tiras de oro para formar un tubo hueco, flexible y de textura envolvente. El resultado son joyas que se ajustan al cuerpo con naturalidad, como una segunda piel, combinando comodidad, sofisticación y elegancia. Esta singular flexibilidad ha convertido a las piezas Tubogas en verdaderos clásicos atemporales que nunca pasan de moda y hoy renacen con fuerza en las propuestas contemporáneas de Grau.

Una joya que se comparte y se hereda
La colección Tubogas no es solo una declaración estética, sino también un símbolo de amor compartido. En palabras de sus creadores, estas joyas están pensadas para ser llevadas indistintamente por madres e hijas, compartidas según la ocasión y transformadas en símbolos vivos de la memoria emocional. Un gesto que trasciende la efeméride para convertirse en una expresión de vínculos genuinos que perduran con el tiempo.
Tradición familiar y visión internacional
Desde su fundación en 1947 en la Costa Brava por la familia Grau-Domenech, Joyería Grau ha evolucionado sin perder su esencia. Hoy, bajo el liderazgo de la segunda generación de la familia, la firma combina una sólida tradición joyera con una visión internacional y un profundo respeto por la artesanía.
Gemma Grau, directora creativa y formada en el GIA (Gemological Institute of America) de California, ha aportado al universo Grau una mirada contemporánea enriquecida por su experiencia en Asia, donde el diseño y el simbolismo van de la mano. Ricard Grau, joyero y gemólogo, dirige el taller propio de la firma y garantiza la calidad en cada fase del proceso, cuidando cada detalle con maestría.

Desde la Costa Brava hasta Barcelona
Con tiendas en Blanes, Sabadell y en pleno centro de Barcelona, la firma es también distribuidor y servicio técnico oficial de marcas como Rolex, Omega y Cartier. Además, en su taller propio se producen las colecciones de la casa y joyas personalizadas por encargo, reflejando una fidelidad total al trabajo artesanal.
Joyas que trascienden el tiempo
En un mundo donde el lujo va de la mano de la emoción, la colección Tubogas de Joyería Grau reafirma que las joyas más valiosas brillan por su forma, su material y, sobre todo, por el significado que evocan
En cada diseño se entrelazan el pasado y el presente, la técnica y el alma, lo visible y lo eterno. Una propuesta que confirma a Grau como uno de los nombres imprescindibles de la alta joyería catalana, y como una firma que entiende que las conexiones verdaderas—como el oro que se pliega sin romperse—son aquellas que se adaptan y perduran para siempre.