Chocolate Amatller ha inaugurado un nuevo espacio divulgativo en el corazón del Born, a escasos metros del lugar donde nació en 1797. Con esta apertura, la histórica marca barcelonesa refuerza su presencia en la ciudad y rinde homenaje a sus raíces con una experiencia inmersiva dedicada al arte del chocolate.
El nuevo enclave, ubicado en la Plaça de les Olles 9, combina historia, cultura y degustación en un recorrido de 40 minutos que conecta pasado y presente a través de los sentidos.
La visita comienza con un viaje audiovisual a la Barcelona del siglo XVIII, donde se explora la figura de Gabriel Amatller, fundador de la marca, y su papel en la transformación del comercio chocolatero en la ciudad.
A partir de ahí, el visitante se sumerge en una degustación sensorial diseñada para apreciar las Flors y Hojas Finas, las creaciones más emblemáticas de la firma. Esta experiencia multisensorial se completa con un taller artesanal de elaboración de chocolate que rescata técnicas originales del obrador fundacional, invitando a los asistentes a interactuar con los ingredientes en un ambiente que celebra la autenticidad y la dedicación manual.
El recorrido culmina con una degustación de chocolate bebido, al estilo tradicional barcelonés, servido en mancerina con la receta original de la casa, rememorando una costumbre arraigada en la historia social y gastronómica de la ciudad.
Este nuevo espacio actúa como centro de divulgación y, además, también alberga una tienda en la que se pueden adquirir las colecciones más representativas de la marca.
Cada detalle ha sido pensado para ofrecer una experiencia de marca envolvente, con una cuidada estética inspirada en su legado modernista y en la obra de artistas como Alphonse Mucha, Apel·les Mestres y Alexandre de Riquer, que firmaron sus míticos carteles publicitarios.
Con esta apertura, Amatller suma ya seis puntos de venta —cuatro en Barcelona—, aunque éste destaca por su carácter divulgativo y patrimonial. El compromiso de la marca con el barrio del Born, con el comercio de proximidad y con el patrimonio cultural barcelonés se materializa en este nuevo espacio que la convierte, una vez más, en símbolo de tradición, innovación y elegancia atemporal.
Desde sus inicios como pequeño comercio en una ciudad en transformación hasta convertirse en una de las marcas de chocolate más longevas de Europa, Chocolate Amatller ha sabido conservar su esencia exploradora y su pasión por el arte de regalar. Una marca que sigue conquistando paladares, emociones y memorias desde su lugar de origen.
