Grupo Tragaluz vuelve a marcar el ritmo en el panorama gastronómico y social de la Ciudad Condal con la apertura de Tapas Lobito, un espacio donde la cocina mediterránea y la tradición japonesa se encuentran para ofrecer una experiencia culinaria única. Situado en pleno corazón de El Born, uno de los barrios más dinámicos de Barcelona, este nuevo local del grupo es la gran apuesta del verano barcelonés.
La propuesta gastronómica es ambiciosa y atractiva, con una carta fresca, dinámica y pensada para compartir, donde la calidad del producto es la gran protagonista. Destacan clásicos reinventados como las croquetas de pollo y jamón ibérico, la imprescindible ensaladilla lobo, el pescadito frito de impecable factura, y el delicioso tataki de atún con guacamole.
Pero si algo diferencia a Tapas Lobito del resto de locales similares es su espectacular barra de sushi, situada estratégicamente en el corazón del espacio. Allí, bajo la atenta mirada de los comensales, un experto sushiman prepara sashimi y nigiris, entre otras delicias del Japón más auténtico.

Todo esto ocurre en un ambiente relajado, sin prisas ni relojes, donde el objetivo es el disfrute, la charla y la convivencia. De ahí que una de las grandes protagonistas del interiorismo sea su imponente mesa central, diseñada específicamente para favorecer el encuentro entre amigos o desconocidos, convirtiendo la experiencia gastronómica en un auténtico evento social. Los grandes ventanales del local, abiertos hacia la animada terraza exterior, permiten una fusión entre interior y exterior que llena el espacio de vida y energía, haciendo que Tapas Lobito sea mucho más que un restaurante: es un lugar de encuentro.
Además de su cocina ininterrumpida todos los días desde las 12:00 hasta medianoche, los fines de semana el local se transforma en un pequeño oasis nocturno con música y cócteles hasta la 01:30h, donde disfrutar relajadamente después de la cena.
En su barra se sirven cócteles clásicos como el Aperol Spritz, el sofisticado Negroni, el refrescante Hugo -St germain, cava, menta y soda- o el infalible Gin Fizz, preparados al momento con precisión y maestría. También destacan propuestas como un Espresso Martini para los amantes del café, o una variada selección de sangrías –tinto, blanco o cava– ideales para acompañar una velada veraniega.

La apertura de este nuevo concepto revitaliza aún más la zona del Port Vell, consolidándose como el punto de encuentro ideal para barceloneses y visitantes en busca de una experiencia gastronómica auténtica, fresca y, sobre todo, muy disfrutable.
El interiorismo del local es otro acierto más del Grupo Tragaluz, que vuelve a demostrar por qué sus locales se encuentran siempre entre los más codiciados de Barcelona. Con techos altos, grandes cristaleras y detalles de diseño muy cuidados, Tapas Lobito genera esa sensación inconfundible de calidez y sofisticación desenfadada, marca de la casa.

Un detalle clave para disfrutar aún más de esta experiencia es seguir las sugerencias diarias que amablemente ofrece todo su gran equipo, que hace de este luegar un sitio donde todo el mundo quiere estar. Y como colofón, los postres: la torrija con helado, la fina tarta de manzana con helado de canela o el cremoso de frambuesa con espuma de yogurt merecen una mención especial por sí solos.
Con una oferta así, Tapas Lobito promete convertirse en uno de los grandes favoritos del público barcelonés para este verano, posicionándose como el punto de encuentro para todos aquellos que buscan calidad y disfrute sin formalidades innecesarias.
Un nuevo destino gastronómico y social que invita a relajarse, disfrutar y compartir, siempre en buena compañía. Porque aquí, como bien dicen, se perdona todo, menos no disfrutar del momento. Y eso, en Barcelona, siempre tiene un espacio asegurado.