Barcelona es una de la joyas del panorama hotelero internacional y gracias a las posibilidades que ofrece nuestro entorno turístico que combina calidad, lujo, gastronomía y cultura, nuestra ciudad goza de prestigio dentro del nicho de la hostelería de lujo.
Tras dos años de importantes obras, la prestigiosa cadena Almanac tiene previsto expandirse por Europa a través de Barcelona inaugurando su primer hotel boutique. Ubicado en la Gran Vía de les Corts catalanes 621, entre Paseo de Gracia y Pau Claris, Almanac Barcelona es un espacio de visita obligada para los amantes del lujo, el diseño y la vanguardia.
Por contradictorio que pueda parecer, los hoteles están abiertos para ofrecer lo mejor tanto a sus huéspedes como a los visitantes. Anticuada es la idea de que los hoteles son solo para hospedarse, y aunque no es habitual en nuestro entorno, por ejemplo en norteamérica los hoteles ofrecen algo más que camas: son el punto de encuentro idóneo para disfrutar de ocio, gastronomía y buen servicio.
Los hoteles ofrecen algo más que camas: son el punto de encuentro idóneo para disfrutar de ocio, gastronomía y buen servicio.
Si bien en los últimos años los hoteles en nuestra ciudad se han abierto al público con varias acciones, el ciudadano de a pie aún tiene una barrera psicológica acerca de las posibilidades que allí se ofrecen; todo ello lejos de la realidad, ya que dentro de muchos hoteles están los mejores restaurantes (con Estrellas Michelin incluida), los cócteles de innovadores mixólogos y bartenders, espacios meticulosamente decorados donde tomar un simple té/café, terrazas con vistas maravillosas sobre la ciudad o santuarios de belleza, relajación y desconexión con propuestas de spa o salones de belleza.
Almanac Barcelona, un lujoso espacio de diseño, gastronomía y ocio.
Con la idea de formar parte del paisaje de Barcelona y su panorama social, atrayendo tanto a visitantes como lugareños, Almanac Barcelona cuenta con un restaurante además de una terraza abierta al público.
En homenaje al sistema urbanístico de cuadrículas del Eixample, el restaurante que ofrecerá platos propios de la brasería mediterránea se llama La Línea. Teniendo en cuenta que los relojes del apetito no siempre están sincronizados cuando se viaja, el restaurante ofrecerá un menú para comer y compartir durante todo el día, donde los habitantes y la vida de los viajeros se cruzan de la mañana a la noche. Además, en intermediación de la zona que unirá el hotel con el restaurante se ubica una versátil zona de bar con cócteles y vinos regionales.
Con Azimuth los barceloneses tendrán otra perspectiva del skyline de la ciudad. Azimuth, es un término utilizado en la navegación para trazar un mapa utilizando la astronomía. La azotea de Almanac Barcelona promete unir el día con la noche con este cautivador bar panorámico que cuenta con un salón interior y terraza exterior abierto a todo el público, y en el que se servirán un inventivo menú de cócteles para transportará los paladares a un viaje alrededor del mundo.
Almanac Barcelona alberga 91 habitaciones, que van desde los 34 a 45 m2, hasta los 1os 125m2 para las suites. La obra ha sido ejecutada por el estudio de arquitectura barcelonés OAB y su fundador, Carlos Ferrater, quien ha llevado a cabo la remodelación de dos edificios colindantes de distintas épocas y que ahora están perfectamente unidos y en sintonía. El interiorismo lo firma Jaime Beriestain quien ha creado un diseño de refinamiento discreto utilizando una gran cantidad de texturas y diferentes materiales.
Tras la apertura en nuestra ciudad la cadena hotelera tiene previsto su desembarco eh otras ciudades europeas como Viena, Budapest y Praga.
