Fiel a su idea de promover el arte en todas sus vertientes, Moco Museum sorprende al público con la genialidad de Refik Anadol. Este artista digital visionario, conocido mundialmente, desafía los límites del arte con una gigantesca escultura de datos de IA.
Su obra inmersiva llega además con millones de imágenes de la naturaleza y satélites, para crear un viaje alucinante por paisajes oníricos y cambiantes. La obra invita a explorar un espacio que fusiona lo físico y lo digital, desatando una nueva conexión con nuestro entorno.
Asimismo, e innovando en las prácticas del sector, Anadol nos sumerge en «Satellite Dreams», una especulación visual de los intentos humanos por conquistar el espacio, y nos maravilla con «Floral Pigmentations», un homenaje a la belleza efímera de las flores en pleno florecimiento. Pero hay más que arte en juego: Anadol nos hace reflexionar sobre el impacto del cambio climático, utilizando tecnología avanzada y un llamado a la acción.
De forma magistral, el artista utiliza una colección de 70 millones de imágenes públicas que capturan la delicadeza y la exuberancia de la naturaleza en su máximo esplendor. Un verdadero homenaje a la vida y a la belleza efímera que nos rodea.
Estamos pues ante una experiencia única en Moco Museum Barcelona, donde el arte y la tecnología se fusionan para redefinir nuestra percepción de la realidad.
Cabe precisar que Anadol ha logrado el reconocimiento internacional con su apreciado arte digital expuesto en grandes museos como el Museo de Arte Moderno MoMA de Nueva York, la Serpentine Gallery de Londres, el Centro Pompidou de París, el Museo de Arte Moderno de Estambul y el proyecto Living Architecture Mapping de la Casa Batlló.
