La italiana Dolce&Gabbana cierra la temporada de desfiles masculinos con sus propuestas otoño invierno 21-22.
El formato elegido por la firma es sencillo, claro y altamente comercial. Sobre una pasarela convencional los modelos lucían los diseños, en un ambiente disco con una gran pantalla detrás en la que se veían a influencers, celebrities y amigos de la casa que ejercían como dinamizadores y público del show. El significado de esta imagen deja de manifiesto que la vida virtual es hoy por hoy el escenario en el que se entablan las relaciones sociales.
Es precisamente el lenguaje digital de la vida virtual la fuente de inspiración de la colección. #DGTogether se inspira en la forma en que los jóvenes se comunican digitalmente y se expresan libremente.
#DGMenFW21 celebra los nuevos lenguajes y conexiones que establecen los jóvenes en la red.
Tik Tok, Instagram, Facetime, Youtube… las conexiones digitales forman parte de nuestras acciones diarias. Sí antes la inspiración se encontraba en las grandes capitales de la moda, de la observación de los individuos y de cómo éstos interactúan en distintos espacios, ahora (ante la imposibilidad de salir como antes) las redes sociales y la vida digital es el lugar en el que nos comunicamos y por tanto la fuente de la que emanan las ideas.
De allí se extraen las claves de esta colección: libertad de expresión uniendo estilos y géneros únicos y diferentes, sin obstáculos físicos ni morales. En esa línea cada vez son más las firmas que, como D&G, nos presentan una nueva versión de la moda masculina marcada por detalles como el maquillaje y accesorios que completan looks en el que vemos perlas, plumas o lentejuelas confirmando que la moda no tiene género y es libre de reinterpretar los dogmas del dress code hasta ahora establecidos para el hombre.
