miércoles, diciembre 4, 2024
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    El Hotel Gallery y Sintonia reimaginan la tradición navideña con una propuesta gastronómica única en Barcelona

    En estas fiestas, Sintonia se convierte en un lugar de encuentro donde la gastronomía trasciende lo meramente culinario para convertirse en una experiencia sensorial. Es un espacio donde tradición y modernidad se dan la mano, invitando a descubrir una nueva forma de celebrar la Navidad en Barcelona. Entre los aromas cálidos de platos de siempre y la emoción de una cocina que no deja de reinventarse, el Hotel Gallery y su restaurante Sintonia proponen un viaje inolvidable a través de los sentidos, con el corazón puesto en cada detalle.

    La Navidad en el Hotel Gallery se vive como un homenaje a la tradición, pero con un giro contemporáneo que solo el chef Pablo Tomás podría ofrecer. Este emblemático espacio en el corazón de Barcelona propone una experiencia gastronómica que celebra lo mejor de las fiestas catalanas, llevando a la mesa sabores auténticos reinterpretados con creatividad y elegancia.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    La escudella con “carn d’olla” y galets, los canelones y el pollo de pagès relleno a la catalana, son pilares de una propuesta que evoca la esencia navideña, mientras conviven con los platos insignia del restaurante Sintonia, como el steak tartar, el croissant ahumado o la gilda de bacalao. Es una carta que respeta sus raíces pero se atreve a innovar, un equilibrio perfecto entre lo clásico y lo contemporáneo.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    La oferta gastronómica para estas fechas es un festín de contrastes y fusiones. Los embutidos ibéricos comparten protagonismo con creaciones de inspiración asiática; el marisco gallego y la gamba roja mediterránea se unen en armonía; y productos emblemáticos como la trufa, las setas y los frutos secos, elevan cada plato a una experiencia gourmet. En esta propuesta no falta un guiño a la proximidad: ingredientes frescos y de alta calidad, cuidadosamente seleccionados por el chef, garantizan que cada bocado sea un reflejo de la esencia de Barcelona y su entorno.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    El restaurante Sintonia es mucho más que su famosa escudella o su steak tartar, considerado por muchos como el mejor de la ciudad. Es una declaración de intenciones, una apuesta por la excelencia que se plasma en cada plato.

    Bajo la dirección de Pablo Tomás, chef formado en icónicos espacios como El Bulli, Arzak y Drolma, la cocina de Sintonia combina tradición e innovación, dedicando horas de trabajo a la elaboración de propuestas que elevan la calidad del producto a su máxima expresión. Desde su estrecha colaboración con proveedores locales hasta la cuidadosa selección de cada ingrediente, todo refleja un compromiso con la autenticidad y la sostenibilidad.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    El Hotel Gallery, situado en un enclave privilegiado en la calle Rosselló -entre Passeig de Gràcia y Rambla Catalunya– no solo destaca por su cocina. Sus espacios, cuidadosamente diseñados, ofrecen el ambiente ideal para las celebraciones de estas fiestas.

    Desde el amplio y luminoso comedor de Sintonia, que parece una extensión de los jardines del Palau Robert, hasta las salas privadas que se adaptan a las necesidades de cada grupo, todo en el hotel está pensado para acoger momentos únicos.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    Aquí, las reuniones familiares, los encuentros de amigos o los eventos empresariales se desarrollan en un marco relajado y sin prisas, con una atención al detalle que convierte cada celebración en algo especial. Las salas privadas se transforman según las necesidades del grupo, ajustando la decoración y el mobiliario para crear un refugio de serenidad en pleno centro de la ciudad.

    © Hotel Gallery. Sintonia.

    A partir del 13 de noviembre, las tardes de miércoles se tiñen de magia navideña con el programa Xmas Soul. Este ciclo de sobremesas combina el mejor jazz navideño, interpretado por Alexandra Larios, con una selección de cócteles exclusivos elaborados con Fever-Tree y acompañados de delicados snacks. Es una forma de conectar al visitante con el espíritu de la ciudad, de calentar las noches invernales y de anticipar las cenas festivas con un toque de sofisticación y alegría.

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