Chanel da un paso decisivo hacia la transformación sostenible de la moda de lujo con la creación de NEVOLD, una nueva entidad independiente dedicada a la circularidad textil y la innovación en materiales reciclados. Anunciada oficialmente el 9 de junio, NEVOLD —acrónimo de “Never Old”— surge como la tercera gran línea de actividad dentro de la estructura de Chanel, junto a su división de moda y la unidad de Métiers d’Art.
Esta plataforma B2B, completamente separada de la estructura operativa de la maison, trabajará junto a un ecosistema de empresas, start-ups e instituciones académicas para diseñar y producir materiales de alta calidad con fibras recicladas. Entre sus primeros socios figuran nombres como L’Atelier des Matières, Filatures du Parc, Authentic Material, así como centros universitarios como la Universidad de Cambridge y el Politecnico di Milano.
NEVOLD nace en respuesta a los desafíos estructurales que afronta la industria: la escasez de materias primas nobles como el algodón, el cachemir, la lana, la seda y el cuero, que suponen el 80% del volumen de materiales utilizados por Chanel.
Lejos de ser una campaña de marketing o un ejercicio de comunicación corporativa, NEVOLD se posiciona como una apuesta estratégica de largo recorrido. Su misión: repensar el ciclo de vida del producto desde su origen, transformando residuos y excedentes de producción en componentes válidos para nuevos diseños.
Los primeros frutos de esta apuesta ya están presentes en las colecciones de Chanel. Materiales como el tweed incorporan hilos reciclados, mientras que el cuero procesado sustituye componentes plásticos en accesorios y calzado, como en los emblemáticos salones slingback, cuyos tacones ahora incluyen materiales reciclados en un 50%.
Al frente del proyecto está Sophie Brocart, ex CEO de la casa Patou (propiedad de LVMH) e ingeniera de formación, conocida por su enfoque innovador y comprometido con la sostenibilidad. Chanel ha confiado en su experiencia para liderar esta nueva fase que apunta a la regeneración de materiales con criterios de trazabilidad y excelencia artesanal.
En palabras de Bruno Pavlovsky, presidente de Chanel y Chanel SAS, NEVOLD busca soluciones a largo plazo y no pretende imponer cuotas de contenido reciclado ni modificar el ADN creativo de la marca. “La misión de Chanel es crear un sueño. NEVOLD nos permite seguir haciéndolo con resiliencia y responsabilidad, porque si no lo intentamos ahora, no estaremos preparados para lo que viene”, afirmó.
Mientras la industria enfrenta presiones por reducir su huella ecológica y adaptarse a las demandas de una nueva generación de consumidores, Chanel demuestra con NEVOLD que la sostenibilidad y el lujo no son conceptos opuestos, sino caminos convergentes hacia un modelo más consciente y duradero.
