BCN Fashion. (BARCELONA FASHION PRESS®).- En pleno corazón del pintoresco barrio del Raval de Barcelona se eleva un edificio de 11 plantas que alberga, en su estancia de acceso, todo un tesoro. Hablamos del RAVAL BRUNCH, una de las ofertas más interesantes del hotel Barceló Raval que ofrece cada domingo, y durante todo el año, un Brunch entre las 12 y las 16 horas.
Tras varias temporadas desde su inauguración, el RAVAL BRUNCH es la mejor opción foodie para los domingos en Barcelona. La dinámica es sencilla, cualquier persona por el módico precio de 25 euros puede disfrutar de un variado buffet libre con distintas tapas, montaditos, sándwiches, ensaladas, quesos y embutidos, además de mini platos que se combinan con variadas opciones dulces como tartas, mermeladas, pastas, brownies y frutas. La experiencia se puede completar con unos huevos florentine con jamón york y salsa bearnesa o los benedictine con espinacas y salsa holandesa.
La cita ofrece también música en directo en un entorno ameno para todos los públicos (familias, adultos, jóvenes…). La disposición y atención de los camareros, el diseño del lugar, las elaboraciones del buffet libre, el precio competitivo, el ambiente que se genera con la música y el entorno del hotel, hacen del Raval Brunch una experiencia única, genuina y de lujo entre todas las ofertas que combinan ocio y gastronomía en nuestra ciudad. Desde la dirección del hotel se hace énfasis en uno de los atractivos de esta iniciativa:
Que la gente de Barcelona conozca que los hoteles están a su servicio y que pierdan el miedo a entrar en ellos.
B-Lounge para cualquier día, para todos los barceloneses
Cabe puntualizar que muchos de los hoteles de Barcelona tienen estancias abiertas al público en las que poder tomar una copa o degustar las mejores propuestas culinarias de nuestra ciudad. En el caso del Barceló Raval el privilegio es doble, ya que en su B-Lounge se ofrece una completa carta de tapas y platos además de la maravillosa terraza 360º con vistas a toda la ciudad condal. No hay punto de la ciudad que no se pueda ver desde la azotea del Barceló Raval ya que se encuentra en el centro del barrio y no hay edificio a su alrededor que le haga sombra: sus vistas son únicas.
Aparte de acoger el tradicional brunch del domingo, que se puede finalizar tomando un cóctel en la terraza, el B-Lounge también funciona como un bar restaurante en el que degustar varias tapas, ensaladas o hamburguesas. El espacio, también funciona como bar de copas.
