BCN Fashion. (BARCELONA FASHION PRESS®).- Después del éxito de la sección Modelo de la Semana, en la que estamos conociendo a los grandes talentos del modelling gracias a la agencia de modelos Francina Models, en esta ocasión os presentamos a Cristina Piaget como «La modelo #BarcelonaFashion del mes».
La top Model española, actriz y cantante Cristina Piaget, es junto a Judit Mascó, Verónica Blume, Vanessa Lorenzo, Laura Sánchez y Nieves Álvarez, una de las modelos más importantes de la historia de la moda española de los años 90. Se ha formado en escuelas de arte por todo el mundo. Cristina creció junto a las películas de su padre, Paul Piaget y ha desarrollado su carrera de actriz en paralelo a su trayectoria profesional en el mundo de la moda.También se formó como bailarina de ballet clásico en el Real Conservatorio de danza de Madrid. Con 14 años empezó en el mundo de la moda, hasta llegar a ser una de las top Models españolas más conocidas y cotizadas a nivel internacional. Con tan solo 16 años, Cristina Piaget fue portada de ELLE Spain.
La modelo ha trabajado con los mejores diseñadores de alta costura, como Christian Dior, Yves Saint Laurent, Valentino o Yohi Yomamoto, entre otras grandes marcas internacionales. Son incontables sus editoriales y portadas en las principales cabeceras de moda nacionales e internacionales, como Vogue, Elle, Marie Claire, Woman, Telva, Vanidad, Donna, Madame Figaro o Mademoiselle. Como actriz destaca su interpretación en lengua inglesa «The Nun/La Monja». En la actualidad podemos ver a Cristina Piaget en la pequeña pantalla en la serie de televisión de RTVE, “Centro Médico”.
PRESENTACIÓN:
Lugar de nacimiento: Madrid
Características físicas: Cabello castaño y ojos verdes. 1.79, 89-66-94 / 41
Cuenta de Instagram: www.instagram.com/cristinapiaget
Número de seguidores: 1.641 (a fecha de esta publicación)
Entrevista:
A los 14 años iniciaste tu trayectoria profesional en el mundo de la moda. ¿Cómo has vivido tu carrera?, ¿Tienes la sensación de haberte perdido algún episodio de tu vida?
En absoluto, la moda me ha dado experiencias inolvidables. He podido viajar a lugares como la India, que tras rodar una publicidad con el prestigioso director de cine John Boorman, aproveche el viaje y me quede trabajando con la madre Teresa de Calcuta. Una experiencia humana inolvidable. Ese viaje me marco muchísimo. La moda me ha enseñado que aprender a valorar lo que tenemos es la clave de todo, porque a veces estamos en un pedestal que es del todo efímero. Lo que cuenta es lo que has dado y saber agradecer lo que has recibido. Esa es la clave para mantener un buen equilibrio en la vida. A mí me toco madurar antes de tiempo, pero por razones ajenas a la moda ya que perdí a mi padre muy joven. Mi madre no me dejo realmente dedicarme al cien por cien hasta que fui mayor de edad. Antes solo trabajaba en vacaciones de verano y en cuanto cumplí los 18 me fui a New York y Paris. Con esa edad mi primer desfile fue con Gianfranco Ferrer para Dior Haute Couture y también con Yves Saint Laurent.
La moda me ha dado una perspectiva vital y una cantidad de experiencias inolvidables que me han hecho crecer mucho como persona.
Como modelo, ¿con qué experiencias te quedas y cuáles borrarías? ¿Alguna anécdota?
Como modelo o como otra cosa en la vida, depende siempre de lo que tú quieras elegir. Hay mil experiencias, positivas y negativas depende del camino que tú quieras llevar. El mío era bastante aburrido en el sentido de excesos, fiestas y lujos cero. Yo era una especie de hormiguita, que todo lo ahorraba y que en cuanto tenía la posibilidad me iba a ver a él Sacre Coeur, o a una exposición de Basquiat, allí donde me pillara intentaba sacar el máximo partido a los lugares en los que trabajaba y siempre que podía tomaba clases de ballet en New York y de interpretación en Londres. Lo que más me gusta del mundo de la moda, es trabajar con los grandes fotógrafos como Giovanni Gaste (sobrino de Visconti que era mi director de cine favorito) con el que se establecía una relación muy poética. Lo que es divertido en la moda es que como no paras de viajar que es el mayor de los lujos, te reencuentras en distintos trabajos con equipos de maquilladores, peluqueros, estilistas y fotógrafos que los volvías a ver. Tamnbién conlleva en ocasiones a sentirse un poco solo.
Se establecen conexiones muy bonitas entre la gente de la moda se comparte un mismo espíritu de libertad y al mismo tiempo de búsqueda.
Hace unos años protagonizaste el corto Disección de una tormenta. El guion exigía raparse la cabeza y además te tuviste que poner en la piel de un personaje que tenía mucha fobia. ¿Cómo fue la experiencia? ¿Cómo te pones en la piel de los personajes?
Gracias por mencionar ese trabajo porque lo tengo en especial consideración. No soy de las personas que tengan que trabajarse mucho los estados de gran intensidad. Me gustan mucho, porque interpretarlos me invita a canalizar un poco lo que quizás yo no he resuelto aún dentro de mí. Últimamente estoy más tranquila, tras ser madre las prioridades cambian. Te preguntas ¿cómo se sentiría ese personaje y porque? Imaginas por todo lo que ha pasado y como la hicieron sentir y una parte de ti se identifica con ella, es una ¡magia! Cada vez estoy más enganchada a la interpretación, me apasiona. Ese corto fue una entrega total por mi parte, un abandonar temporalmente mi ego. Recuerdo que mi amigo y gran fotógrafo Bernardo Doral vino a inmortalizar el momento «rapado». En el momento de la verdad sorprendentemente no me daba ninguna pena el desprenderme de mi pelo y en la escena tenía que llorar. Tuve que utilizar la técnica de la que te hablaba, visualizar más el dolor del personaje que el mío porque a mí me daba igual. En esta vida todo es transitorio.
Tengo muchos registros para hacer personajes con alto voltaje de sufrimiento y me gustan mucho, porque interpretarlos me invita a canalizar un poco lo que quizás yo no he resuelto aún dentro de mí.
Incluso ahora que te has desvinculado un poco del modelaje tienes un cuerpo cuidado, lo que podríamos decir “un cuerpo 10”. ¿Cómo te cuidas? Cuéntanos tus secretos.
Hay un componente genético al cual hay que agradecer el cuerpo que tengo, del cual yo no tengo ningún mérito. Mis secretos son bastante mundanos. Me muevo en bici por todo Madrid y con las cuestas del barrio ya tengo mi pequeña dosis de ejercicio diario. También practico yoga siempre que puedo al aire libre. Además sigo bailando ballet ahora por un tema que me vincula a una banda de música en la que colaboro con mis propias coreografías. Un hábito para mí, es nada más levantarme, calentar un poco de agua y exprimir medio limón. Eso me ayuda a regular el PH y a alcalinizar que es la base de todo para tener un buen sistema inmunológico. Hay que ser consciente de que es y lo importante que es evitar tomar alimentos que no aportan nada.
Vivo en Lavapiés, que está lleno de cuestas. Llevo al peque en la bici al cole todas las mañanas, así que se puede decir que empiezo el día con mucha energía.
¿Cómo es un día con Cristina Piaget? ¿Qué te motiva en tu día a día?
Mi día a día se divide en dos partes. Una en la que me dedico sobre todo a mí, preparando mis intervenciones tanto en la música, baile y actorales, así como presentarme algún casting. Comprar en el mercado es un ritual, evito los supermercados e intento comprar cosas sanas que alimenten. En algún momento del día, si me pilla en casa, me gusta elaborarme un «smothy» que me asegure el aporte de energía real que necesita mi cuerpo. Intento que sea lo más variado posible mezclando espinacas, semillas, frutos secos, frutas acidas, superfoods, siempre un poco de aguacate y así me garantizo que me alimento, porque a veces por las prisas o fuera de casa no como todo lo sano que puedo. Me obligo dos veces por semana a primera hora de la mañana a practicar meditación vipasana o lo que llaman mindfullness, me ayuda a controlar los niveles de estrés. La segunda parte del día por la tarde yo ya no existo, se la dedico por entero a mi hijo y ya me desconecto de todo lo demás y observo cómo crece, que no me lo quiero perder.
Es muy importante tener siempre una actitud positiva, es primordial en esta profesión, más que la belleza en sí.
Junto a Judit Mascó, Vanesa Lorenzo y Nieves Alvarez, entre otras modelos, has sido una de las top Models más famosas de los 90 aquí en España. Sois el punto de mira de muchas jóvenes modelos. ¿Qué consejos les darías a todas estas jóvenes que empiezan a destacar?
Que intenten ser muy profesionales pero al mismo tiempo no se lo tomen muy a pecho porque a veces existe el rechazo y eso no puede afectar tanto que a veces nos identificamos con ello y es simplemente que un cliente no busca ese día ese tipo de look. Y por último que confíen en sí mismas, que exploren su propio estilo y lo propongan creyendo sobre todo en ellas mismas.
Volver a desfilar fue inesperado pero divertido. Fue muy emotivo reencontrarse y pisar fuerte de nuevo todas juntas la pasarela.
Este febrero el gran diseñador Duyos, quiso celebrar su XX aniversario haciendo historia. Para ello reunió a las 10 modelos que escribieron la historia del modelaje aquí en España, entre ellas tú. Cuéntanos como fue el desfile. ¿Qué tal la experiencia de volver a desfilar? ¿Qué relación tienes con las otras modelos?
Volver a desfilar fue inesperado pero divertido. Actualmente estoy colaborando en un proyecto musical que hace que me siga subiendo a escenarios como el pasado sábado en “Rock Ola” por lo que supuse que todo iría bien en MERCEDES BENZ FASHION WEEK MADRID, pero fue volver pisar esa pasarela tan larga y oscura que en un momento del desfile pensé que me iba a caer. Hable con otras compañeras y compartieron esa sensación, para que veas que a veces encima de la pasarela nos transformamos y se nos ve con una seguridad increíble y por dentro no te sientes así y sigues adelante.Ha sido un honor participar en este aniversario de un diseñador tan emblemático para la moda española. Con todas las modelos del desfile mantengo muy buena relación con todas ellas y las considero muy especiales en todos los sentidos. Son modelos de mujeres, de madres, de activistas y de empresarias. Como dice el refrán “quien tuvo, retuvo”.
