Hoy nos adentramos a conocer una parte de Sofía, el antiguo Hotel Princesa Sofía que tras importantes obras ha cambiado su imagen y espíritu, para traer a Barcelona algo más que un hotel. Referente en el parque hotelero de nuestra ciudad, el actual Sofia tiene la vocación de convertirse en uno de los puntos de encuentro más exclusivos de Barcelona.
En una exclusiva presentación, hemos conocido a Zuu, el nuevo espacio que combina ocio nocturno y gastronomía. Para entender mejor esta propuesta es necesario hacer un ejercicio: olvidad por un momento que estamos en Barcelona e imaginar que nos encontramos en el club más cool de Manhattan o en el nuevo lugar de moda en capitales internacionales como Milán, Londres o París.
Olvidad por un momento que estamos en Barcelona e imaginar que nos encontramos en el club más cool de Manhattan, París o Milán.
Zuu ha ideado un nuevo concepto de cena-espectáculo, con un ambiente envolvente que invita a los asistentes a vivir una nueva experiencia, aunando música e interpretación en vivo mientras los comensales disfrutan de un singular menú ideado para una noche especial y diferente.
En la presentación los asistentes fuimos recibidos con Lujuria, el nombre de uno de los cócteles de autor que se servirán, y preludio de las sensaciones que se pueden llegar a vivir en esta nueva propuesta de cena espectáculo única en Barcelona.
Zuu te hará descubrir tu lado más “misterioso, descarado y seductor”.
Ambientado en los cabarets parisinos, Zuu es un espacio deiseñado por Jaime Beriestain y su interiorismo evoca la gama de colores de la pantera negra, como son los negros profundos, los rojos sombríos, los oros antiguos y los violáceos oscuros. Se han utilizado materiales y acabados de calidad y tecnología de última generación para todo el espacio que cuenta con un escenario central y otro principal para las actuaciones.
Éstas son las auténticas protagonistas del local. Bajo la producción artística de de Desvarío Producciones, Zuu presenta un espectáculo que envuelve al público desde las primeras melodías. Por esta razón, todos los elementos están integrados y no se hace diferencia entre artistas y camareros. En la performance de hoy se hicieron tres pases en el que constatamos que se trata de un life show donde todo puede ocurrir.
Las actuaciones de música y baile hacen que el espectador quede inmerso en una experiencia gastronómica con sabores y texturas que se presentan en armonía con una insólita puesta en escena del menú.
La presentación de los platos, con un original elemento como base del servicio gastronómico, está inspirada en contradicciones surrealistas. A modo de candelabro giratorio diseñados especialmente para Zuu, se sirvieron una selección de tapas y platillos gourmet creadas por el chef Carles Tejedor. Estas propuestas culinarias contraponen diferentes texturas: frío/caliente, crujiente/blando, vegetal/animal… y se completan con un plato principal a escoger. Para terminar con buen sabor de boca, se propone un único postre pensado para Zuu.
La velada estuvo acompañada con el mejor champagne. Aquí cabe apuntar que en Zuu contará con exclusivos espumosos de todo el mundo. La carta de champagnes y cavas cuenta con numerosas referencias de Bollinger y además dispone en exclusiva del “Vieilles Vignes Françaises 2006”.
Con una transgresora puesta en escena, Zuu busca despertar asombrosas sensaciones en los comensales. Por eso, el espacio se presenta como “misterioso, descarado y seductor” e invita a dejar salir “el lado más canalla” de sus clientes. Con la llegada de la medianoche, y tras la cena-espectáculo, Zuu se convierte en club. La música invade el espacio, invitando a los asistentes a bailar y a degustar sus diferentes cócteles.
